Dentro de unos días se cumple un mes desde que unos pseudo estudiantes tomaron las puertas de la Universidad para hacerse escuchar.
Pero, ¿por qué los llamo Pseudo estudiantes? ¿Es que acaso no comprendo que están luchando "por el bienestar de nuestra bienamada alma mater? De plano soy otra estudiante más de las que nunca apoyan nada, pensarán.
Realmente, si creyera que habrá un cambio de 180 grados en la situación, que mejorarán la situación estudiantil y reducirán la corrupción que se maneja dentro de los muros de la U, entonces, allí sí, apoyaría con todo. Pero como sé que no es así, y que estas personas solo están valiéndose de la pantomima de decir "somos estudiantes, luchamos por ustedes" para que el pueblo universitario los apoye y así conseguir su rajita, entonces no, no los apoyo.
Pero esa es solo una opinión personal.
Lo más preocupante de todo, es un asuntito que se tiene olvidado. La Reputación de la Tricentenaria.
Hace treinta años decir "soy sancarlista" era un honor, los guerreros del pueblo, las personas comprometidas que lucharon y que fueron cazadas por la milicia, acribillados en los portones de la Universidad, o Uniéndose como guatemaltecos para derrocar a tiranos. Esos, señores, esos si pueden llamarse mártires. Estas personas forjaron con sudor y sangre una buena reputación para la San Carlos.
Ahora, si se dice "soy sancarlista" se te quedan viendo y dicen "¿san carlista?" y si les es posible se alejan con la mentalidad de "no, allí solo bochinches son".
Es lamentable escuchar comentarios de terceros, ajenos a la San Carlos, donde se nos pintan de delincuentes, de bochincheros, de personas que no hacen nada, todo, consecuencia de situaciones como la actual.
Está muy bien levantar la voz por algo que no nos gusta, exigir nuestros derechos, pero hay que saberlo hacer, estar con pasamontañas y bates parece más vandalismo que verdadera lucha.
Es preocupante ver como un grupo de 15 fulanos está haciendo pedazos lo que muchos han intentado levantar. Como les importa un reverendo cacahuate si el semestre es anulado, o si el privado se retrasa otro mes, no les interesa saber cuántos protocolos han sido atrasados o cuantos tramites de meses se han ido a la basura por no poder concluirse, cuantas actividades anuladas, mucho menos cuanto está gastando extra cada estudiante para solventar los gastos de dirigirse a escuelas públicas, bodegas, cafe's o hasta el parqueo donde les fueron repartidos los exámenes.
Realmente, quién se está preocupando por la mala apariencia que le están dando a la San Carlos? Es que acaso no ven el daño que le están haciendo?
Ya déjense de babosadas y hagan las cosas bien, tomar un lugar no impedirá que el CSU se reúna, para eso tienen el colegio de Ingenieros. Cerrar la U no impedirá que ellos cobren su salario, tampoco hará que ellos renuncien. Lo único que se logra con cerrar la U es perjudicar a los miles de estudiantes que con esfuerzo intentan superarse y presentar a la Universidad del pueblo como el recurso para personas que no quieren trabajar y que intentan conseguir todo fácil y por la vía del conflicto.
Realmente, esta situación ya está rayando en lo ridículo.
Para terminar la verborragia, solo me queda felicitar a todos esos catedráticos que han aceptado la responsabilidad, que han hecho algo para que sus estudiantes no salgan afectados y así continuar con el semestre, eso demuestra que no todo está perdido y que aún quedan personas que se preocupan por el nivel academico de la Universidad